domingo, 30 de octubre de 2016

AULA DE RELAJACIÓN O AULA ZEN

Para evitar la manera impulsiva de reaccionar de nuestros alumnos y, en el intento de disminuir su agresividad, vamos a realizar este curso unas sesiones de relajación. Para ello, y en tanto se prepara un aula específicamente para trabajar la Inteligencia Emocional, hemos habilitado una clase que utilizamos también en otros programa que se llevan a cabo en el centro.

 
Se trata de un aula que tiene el suelo de tarima. Para comenzar a trabajar, nos ha bastado con utilizar:
  •  un equipo de música, que utilizamos para poner música relajante.

  • un humidificador, que expande en cada sesión una esencia diferente.
  • Con esta esencia se impregna un pañuelo que se introduce en un bote cerrado y se lleva luego a la clase, para que los alumnos lo puedan volver a oler y recordar lo que sintieron en la sesión de relajación a la que asocian ese olor.

  • una lámpara con luz tenue, para crear un ambiente adecuado. El mismo humidificador es una lámpara que va cambiando de color y, sobre unos fluorescentes hemos puesto unos papeles de celofán de color azul, para evitar la luz intensa.  


  • También, para que los niños se queden fríos, enchufamos un radiador un poco antes de comenzar la sesión, o utilizamos unas finas mantitas, que ponemos sobre los niños, cuando están echados en el suelo. 
 


Se nos ha ocurrido poner un nombre a esta aula. Durante una semana, todos los miembros del claustro estuvimos poniendo en una pizarra los nombres que se nos ocurrían a cada uno. Al final votamos a ver cuál era el que más nos gustaba y el nombre elegido fue AULA ZEN.

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